El título de esta entrada ya nos dice algo. La pequeña capilla de Santa Lucía en Paso Centurión. Un lugar poco poblado donde casi todos son familia y los que no lo son, "son como" familia.
La ultima vez que se visitó esta capilla para celebrar una misa fue a comienzos del pasado año 2016, el 27 de febrero, con nuestro querido padre Miguel.
Desde entonces no se había visitado la capilla, la cual no se encontraba en buenas condiciones en lo que a pintura y revoque respecta.
Previendo la memoria de Santa Lucía el 13 de diciembre, se visitó la capilla el día 11 con el fin de realizar algunos cambios en la pintura, por lo menos de dos paredes para dejarla "presentable", según un vecino del lugar.
Con el padre Nacho como invitado para celebrar la Santa Misa, se arriba a la capilla 20 minutos antes de las 10 am. Entre charlas amenas con los habitantes del lugar se nos pasó un poco la hora, comenzando con la Santa Misa a la hora 10:20.
Luego de la Santa Misa, compartimos entre todos pizza, fainá, pastafrola, empanadas y un refresco; conviviendo un momento con esta pequeña y cálida comunidad, quienes se creían olvidados luego del fallecimiento del padre Miguel.
Entre agradecimientos, abrazos y ganas de volver pronto, nos despedimos y marchamos con rumbo a la antigua aduana a pasar un rato meditando acerca de todo lo que habíamos vivido.
Cerca de las 2 pm emprendimos viaje nuevamente, esta vez retornando a Melo, con las mochilas y el baúl lleno de buenos momentos, cerrando un día bastante movido y misionero.
Gracias a toda la comunidad de la Capilla Santa Lucía por recibirnos y gracias al padre Nacho por su disposición.
Compartimos algunas de las fotos a continuación.
Luego de la Santa Misa, compartimos entre todos pizza, fainá, pastafrola, empanadas y un refresco; conviviendo un momento con esta pequeña y cálida comunidad, quienes se creían olvidados luego del fallecimiento del padre Miguel.
Entre agradecimientos, abrazos y ganas de volver pronto, nos despedimos y marchamos con rumbo a la antigua aduana a pasar un rato meditando acerca de todo lo que habíamos vivido.
Cerca de las 2 pm emprendimos viaje nuevamente, esta vez retornando a Melo, con las mochilas y el baúl lleno de buenos momentos, cerrando un día bastante movido y misionero.
Gracias a toda la comunidad de la Capilla Santa Lucía por recibirnos y gracias al padre Nacho por su disposición.
Compartimos algunas de las fotos a continuación.
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